Estamos ahí, en todos lados...

¨El panorama sobre todo si uno lo ve desde el puente, es prometedor. El río es ancho y caudaloso y por sus aguas asoman la cabeza de por lo menos 25 escritores menores de cincuenta, menores de cuarenta, menores de treinta.
¿Cuantos se ahogaran?
Yo creo que todos".
citado por Helena

"Porque, le conté, lo cierto es que lo he olvidado todo,
lo he olvidado todo, lo he olvidado todo.
Porque, le conté, en realidad soy un viejo desgraciado,
malhumorado y solitario y quiero morir."
El Libro Negro, de Orhan Pamuk
vía Vontrier

Hoy Oyola tiene su debut. Una de las lecturas que más adelante va por ahora en lo que respecta a "lecturas" de escritores. De escritores jóvenes. Hace poco preguntaba sobre qué escribir y Helena me tiró esa frase. Una real realidad que siempre aparece: todos ahogados.

Lo que hacen en Carne Argentina también tiene su contra: no creo que haya un registro de todo lo que sucede cada noche de lectura. Y en el caso de que lo haya, será tan difícil promocionarlo, distribuírlo que tal vez no valga la pena.
¿Qué vale la pena? ¿Publicar un libro vale la pena? ¿Es así? ¿Qué buscamos? ¿Fama? ¿Prestigio? ¡¿Venderrrrrr?!
Por otro lado, ¿a qué otra cosa dedicarle este valioso tiempo que le dedico a lo que otros escriben o a lo que yo escribo ? ¿A quién llevarle la factura? ¿De qué se trata todo esto?
Esta y otras preguntas se responden en las lecturas de Carne Argentina, Maldita Ginebra, Es a Propósito, La Góndola, Poesía Urbana, Grupo Alejandría... y además, hay respuestas a preguntas todavía no hechas.
Cosas que surgen, globos que surcan el aire sin dirección... y qué pena... tantos se pinchan antes de alcanzar el viento...
¿Vas a quedarte en tu casa? Y sí, la verdad... es mejor quedarse tranquilo, poner una peli o no, sentarse a la mesa, comer con el estómago relajado y hacer la digestión con un puchito o un tesito de boldo. Sentarse en el sillón favorito (o la cama) y leer un libro (un libro bueno, eh) y contentarse porque el frío y la lluvia están de la ventana para afuera o porque mirás el paquete y apenas fumaste uno de los 20 phillip...
O tenés una tuquita, revisás el freezer y no, mejor; quedó una piedrita envuelta en un naylon azul (restos de petróleo desvalorizados) o un amigo te llamó por teléfono y te dice "menos mal que te encuentro, no sabés lo que me pasó" y agradecés que no fuiste a la lectura, que estás ahí, para tu amigo, para escucharlo, para hacerle bien a alguien.
Porque para eso es, ¿no? Hay que hacerle bien a alguien.
Entonces... voy a oír a mi amigo.
Entonces yo me voy al Mantis
porque alguna respuesta estoy buscando
y todavía no encontré
o sí
o me espera esta noche...

Porque de todas maneras
me voy a ahogar
como todos ustedes.